22 noviembre 2012

Πηνελόπη


"Penélope, mi amante fiel, mi paz; 
deja ya de tejer sueños en tu mente. 
Mírame. Soy tu amor. Regresé."
Cuenta la leyenda que Penélope, abnegada esposa de Ulises, durante los veinte años que éste se tomó en volver a Ítaca se dedicó a tejer un sudario, el cual debía estar acabado antes de tomar a uno de los múltiples pretendientes por marido. Para dilatar más este periodo de castidad forzosa, por las noches destejía lo que había tejido durante el día. 

A día de hoy muchos la calificaría de "la muy perra", sin embargo quiero romper una lanza en su favor. No me cuesta mucho imaginármela rodeada de pretendientes babosos, plastas e insensibles que revolotearían a su alrededor como moscardones planeando sobre un tarro de rica miel.

¿Acaso no habéis dejado para más tarde algo que podíais tener ya hecho? ¿Nunca os habéis visto constreñidos a tomar parte en asuntos que no eran de vuestro interés? Independientemente de vuestras respuestas, hoy me siento una Penélope de la vida y al que me lleve la contraria juro que le clavaré alfileres debajo de las uñas.

3 comentarios:

Susurros dijo...

Te entiendo perfectamente, a veces nos vemos en situaciones que para nada nos gustaria estar, o tomar decisiones en temas que tambien nos envuelven de pronto sin interesarnos lo mas minimo, y al final lo vas dejando y siempre se queda ahi para luego

Gracias por tu visita y tus palabras

besos

Ciocco dijo...

Gracias a ti por tu comentario, hacía mucho que no me escribía nadie. Esto me anima a seguir trabajando con las palabras aunque sólo sea puntualmente.

Clara dijo...

Penelope era muy inteligente y muy mujer. Estaba enamorada de su marido y encontro la manera de burlar las leyes.
OLE!